Cuando el corazón se duele

Cuando el corazón se duele, las lágrimas brotan sin forzar los más íntimos sentimientos.

Cuando el corazón se duele, el corazón se detiene.

Cuando el corazón se duele, todo se congela y se siente el marzo momento.

Cuando el corazón se duele, sólo tus palabras sinceras pueden componerlo.

Cuando el corazón se duele, el verso no vuela en la noche y en aquel horizonte.

Cuando el corazón se duele, no requiere de insultos o burlas inmaduras.

Cuando el corazón se duele, necesita compañía y amor para romper esas ataduras.

Cuando el corazón se duele, la noche se transforma en el clamor de un alma enamorada.

Cuando el corazón se duele, ese río nace sin pestañear al tan sólo mantener la mirada en la luna consensuada.

Cuando el corazón se duele, todo duele, hasta en la misma médula.