Me encuentro compartiendo palabras en un estado de intemperancia,
sólo el aire y la noche en la cual se derrama, son testigos del clamor que vive esta alma,
es impensado al ojo humano poder comprender un sentimiento sin siquiera haberla tocado o visto tan siquiera a una distancia temprana.
Me encuentro esperando a quien le debo fidelidad en el amor que no comprende,
en esa clave pura y silvestre, disfrazada de esperanza y lealtad sugerente,
tan sólo le entrego lo que no entiende, el amor que Dios a puesto en mi ser para quien reconocí al tan sólo verte.
Me encuentro profundamente enamorado de la inspiración que recojo en estos versos apasionados,
guardo en mi corazón tus palabras y versos, los que son tesoro para este vasallo hambriento,
tan sólo te reconocí en ese mar de gente aquella noche fría y silente, por ello he sido insistente, por ello te digo: mi amor, no te desesperes en la etapa primera de una vida llena de azucenas.
Me encuentro en un estado atípico,
tan sólo quiero tu abrigo,
tan sólo espera por quien realmente te ama hasta el infinito.
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